Con la presencia de 21 representantes de diferentes municipios de la Región de La Araucanía, se llevó a cabo la primera reunión de trabajo del país con el objetivo de realizar modificaciones al Sistema de Certificación Ambiental Municipal, programa que lidera el Ministerio del Medio Ambiente y que fue creado en 2009.
En la ocasión, el Seremi del Medio Ambiente de la región, Félix Contreras, indicó que “es muy importante la participación e involucramiento de quienes coordinan las temáticas ambientales en los diferentes territorios, pues con su experiencia se puede fortalecer, enriquecer y mejorar estos instrumentos de gestión”.
Las sesiones de trabajo buscan inyectar en el SCAM procesos más simples y focalizar el sistema mediante nuevos mecanismos, que permitan poner en valor el trabajo ambiental desarrollado por los municipios, incorporando los nuevos desafíos que plantea por ejemplo el Acuerdo de Escazú para fortalecer la participación, asegurar el acceso de la información por parte de la ciudadanía y fortalecer la democracia ambiental. Prontamente se realizarán también talleres en Ñuble, Coquimbo, Biobío y Maule.
Participaron de la actividad profesionales de las unidades de medio ambiente de los municipios de Angol, Carahue, Curacautín, Curarrehue, Ercilla, Freire, Galvarino, Gorbea, Lautaro, Loncoche, Lonquimay, Los Sauces, Melipeuco, Nueva Imperial, Pitrufquén, Pucón, Temuco, Teodoro Schmidt, Toltén, Traiguén y Vilcún.
Esta instancia, también fue muy enriquecedora pues permitió que las contrapartes pudieran vincularse en virtud de sus problemáticas ambientales, similitud de territorio y líneas estratégicas que abordan en sus comunas, con el fin de generar un trabajo colaborativo.
Además, se revisaron elementos y consideraciones técnicas para el desarrollo de los Planes de Acción Comunal de Cambio Climático, que deben llevar a cabo los Gobiernos Locales acorde a los compromisos indicados en la Ley Marco de Cambio Climático. En la instancia, se resaltó la importancia de que los municipios conformen un equipo gestor capaz de articular las distintas direcciones municipales con competencia en materia climática y además se presentaron ejemplos de medidas de adaptación y mitigación que pueden ser incorporados en la puesta en marcha de este instrumento.
Recordemos que el SCAM es un sistema integral de carácter voluntario, que permite a los municipios instalarse en el territorio como un modelo de gestión ambiental y ha permitido establecer una cultura ambiental en los diferentes municipios adscritos al sistema. Sin embargo, dado el vertiginoso cambio de las condiciones ambientales en la última década, este modelo ha cumplido un ciclo y debe alinearse con los nuevos desafíos ambientales como lo son la emergencia climática, el Acuerdo de Escazú y los Objetivo de Desarrollo Sostenible, entre otros.